Será difícil para mí resumir en pocas palabras la
personalidad de Carles Cuadrat. Es hombre con firmes convicciones, tiene las
cosas claras, lucha por conseguir ser el mejor. El deportista ha optenido muchos éxitos en su carrera como jugador, después como modelo y en una segunda
etapa como entrenador asistente.
Conocí a Carles a través de un programa de tv, vino para ser
entrevistado en plató, desde entonces nuestra relación de amistad se fue fortaleciendo
hasta que cogió a la maleta y se marchó a “conocer mundo” como modelo. Cuadrat había
sido deportista profesional hasta los 30 cuando una lesión lo apartó de los
campos de fútbol. En la década de los 90 fue una cara muy popular en campañas
publicitarias y spots de tv.
A mediados del 2 mil volvió al fútbol, preparándose con
titulación de INEF, formando parte del equipo que Frank Rijkaard hizo tras marcharse del Barça. Carles
junto a su gran amigo y ex futbolista, Albert Roca, viajaron con el holandés por Turquía y Arabia Saudí.
A su vuelta a Barcelona el deportista volvió al mundo de la
moda, su teléfono siempre sonaba pero a él le apetecía volver a su faceta de
entrenador. Recuerdo que la última vez que almorcé con Carles, en el
Restaurante Toto de Barcelona, me habló de las ofertas que había recibido junto
a Albert Roca para entrenar equipos fuera de nuestras fronteras.
Cuadrat y Roca viajaron a algunos países para estudiar las
propuestas pero finalmente llegó la más interesante y prometedora. Recuerdo que
a principios de mayo me llamaba desde el aeropuerto para decirme “Santi me
marcho a El Salvador para entrenar a su selección nacional junto”
.
En menos de un mes el tándem se ha hecho cargo del equipo, su
puesta punto y sus cambios de estrategia. Este sábado llegaba uno de los
momentos más importantes en la carrera deportiva de mi amigo, enfrentarse a la selección
española de Vicente de Bosque. Como él mismo definía en la redes sociales “el
partido de Washington fue una experiencia inolvidable”.
Seguro que Carles y Albert darán mucho de qué hablar en su
periplo latinoamericano, volverán a España como triunfadores y apuesto que
ficharán por un gran equipo. Mucha suerte a los dos.