El centro de Barcelona era un hervidero durante toda la
mañana. Cientos de personas han hecho cola para pedir autógrafos a sus autores
preferidos, mientras otros compraban rosas, de todos los colores, incluso de
caramelo.
Como era de esperar en
el desayuno previo a las firmas, en el Hotel
Regina, muchos escritores han faltado a la cita. En cambio no se han
perdido esa tradición Gemma Mengual
y Anna Tarrés. Las dos no se han
saludado y cada una ha hecho piña con los suyos.
Mañana sabremos qué
libro será el más vendido, entre los mediáticos seguro que Albert Espinosa, el artífice de “Polseres Vermelles” se lleva el gato al agua.