“El tiempo pasa sin darnos cuenta y, nos ayuda a construir lazos de amistad que se convierten en vínculos poderosos”. Con esta frase de Rosa Tous hija, colgaba en su cuenta de Instagram,sus sentimientos hacia la pequeña de los Alba.
Son ya 17 los años de relación laboral y personal entre Eugenia Martínez de Irujo y los empresarios, algo que nació de forma puntual derivando en una vinculación laboral más allá de un puro contrato.
La Duquesa de Montoro empezó a dar sus primeros pasos como imagen de Tous cuando era novia de Francisco Rivera, con los maestros joyeros Eugenia se ha hecho diseñadora creciendo emocionalmente.
Rosa y su marido Salvador, así como sus 4 hijas han sido un gran apoyo para la aristócrata desde su boda, sus crisis sentimentales, su divorcio pasando por la muerte de su madre, La Duquesa de Alba, siempre en ellos ha encontrado a una verdadera familia.
Así las cosas Eugenia ha vuelto a recuperar su vida social gracias a la presentación en el Hotel Room Mate Óscar de las nuevas gafas Miami de la mano de De Rigo. Rosa y Alba Tous junto a la Duquesa y Pau Fonts, Presidente en España de la marca de gafas, dieron a conocer estos flamantes modelos con un toque Art Decó.
Martínez de Irujo sobre su vida manifestó los siguiente “Recuerdo a mi madre, no es fácil vivir sin ella”. Respeto a si tiene una nueva relación a raíz de verla al lado de un caballero, Eugenia añadió “Se trata de un buen amigo desde hace años, con el que comparto parte de mi tiempo”.
Por su parte esta semana, el 27 de mayo, La Duquesa de Montoro asistirá a la subasta de varios capotes de toreros, dinero destinado a la” Fundación Pequeño Deseo” de la que es patrona desde hace 8 años.
Eugenia visitó hace unos días la exposición “Estrella al Quite” en el Tendido 11 de Las Ventas, dando las gracias a los toreros por prestar sus herramientas de trabajo, precisamente en uno de los capotes la aristócrata ha volcado su arte pintando. ha sido sobre el capote de Sebastián Castella.
La pequeña de los Alba agradeció la colaboración de todos. “agradezco a los toreros su ayuda para cumplir los deseos de los niños enfermos, con la intención de darles apoyo anímico y poder romper la rutina de sus tratamientos que son duros y largos”.