Es una persona generosa, nunca tiene un “no” para nadie así es el artista y así es la persona, Rafael Amargo es todo corazón. Desde muy joven se hizo empresario, montó su propia compañía dando vueltas por el mundo demostrando su arte universal.
Siempre envuelto en proyectos y realidades culmina este año una década con el show “Ópera y flamenco” representado en el Palau de la Música de BCN y actualmente en el Teatre Poliorama.
Hace unos días el artista, una vez acaba la función, se trasladó a uno de los restaurantes más carismáticos del centro de la Ciudad Condal, “Thai BCN” dirigido por Clara Roca.
Amargo estaba comprometido con la Associació Catalana de Fibrosis Quística que celebra una cena benéfica. Más de 200 personas acudieron a la cita, entre ellas el Presidente de la citada entidad así como el personal de la Unidad de Fibrosis Quística de l´Hospital de la Vall d´Hebrón.
Los comensales disfrutaron de una opípara cena, de las bailarinas de danza tradicional tailandesa, de un sorteo de regalos y de la solidaridad. La guinda la constituyó la actuación del bailarín y coreógrafo con toda su compañía.