MAR FLORES HABLA CLARO Y ALTO PARA VANITY FAIR


La modelo y presentadora fue en los 90 uno de los personajes mediáticos más buscados, sus relaciones sentimentales tras separarse de su marido Carlo Constanzia di Castiglione fueron centro de atención.
Alessandro Lequio, Cayetano Martinez de Irujo o Fernando Fernández Tapias fueron amores que no llegaron a buen puerto en la vida de Mar Flores. La desesperación se adueñó de la alta y espigada mujer nacida en el barrio madrileño de Usera que la llevaron incluso a ser hospitalizada.
La vida volvió a unirla a uno de sus primeros novios,Javier Merino, con el que se casó y la hizo madre de tres hijos. Ahora es portada de la revista Vanity Fair del mes de noviembre confesando su devoción y pasión por el empresario que la alejó de las polémicas.



Mar Flores no puede evitar agradecer el papel que Merino ha significado en su vida, así lo declara en Vanity Fair."Si no aparece Javier no hubiese vuelto a estar con ningún hombre.Me ha curado de amor.
"Siempre he querido ser la mejor,siempre he soñado muy alto". "Es este país si un tío sale con tres mujeres un machote. Si eres mujer y haces lo mismo, una prostituta".